CUIDADOS DEL SUELO DE TARIMA

Hoy vamos a hablar de cómo limpiar el suelo de tarima.

Este material requiere más cuidados que otros tipos de suelo y por ello vamos a explicar cómo se debe de cuidar y limpiar:

• ESPECIAL CUIDADO CON LA HUMEDAD: Hay que escurrir muy bien la fregona, evitando así que se queden residuos en el suelo.
• EVITAR EL SOL: El sol se come el color de la tarima cuando se encuentra en una exposición de forma prolongada. Esto se soluciona colocando unas cortinas en las ventanas y… ¡listo!.
• NUESTROS ZAPATOS: Lo bueno sería quitarse los zapatos antes de entrar en casa, pero si no hacemos esto, tenemos 2 opciones:
  • Limpiar los zapatos bien en una alfombra.
  • Limpiar el suelo rápido para que luego las manchas no sean tan difíciles de quitar y no se vayan quedando marcas. En la tarima cuanto más tiempo se queda una mancha sin limpiar, más probabilidades hay de que no se vaya o quede rastro.

LIMPIEZA DE LA TARIMA O PARQUÉ:

• Pasar la aspiradora. Mucho mejor que la escoba, que termina dejando suciedad.
• Pasar la fregona bien escurrida y si es posible con agua destilada. Si es tarima se puede usar fregasuelos, si es parqué, mejor no. La fregona la pasaremos haciendo presión en la dirección de las lamas. Así evitamos que en los huecos entre suciedad y agua.
• Como en todas las limpiezas de suelo, iremos cambiando el agua con frecuencia para evitar llevar suciedad de un lugar a otro de la casa.
• En el suelo de tarima es necesario una segunda pasada de fregona para que el suelo quede bien. Esta segunda vez es aconsejable pasar el agua con vinagre de manzana. De esta forma conseguiremos que el suelo brille.